10/12/08

Argentina: Texto de la Sentencia a los Generales Bussi y Menéndez (VI)

Testimonio de Gustavo Enrique Herrera.-

El testigo, actualmente psicólogo social y vendedor de libros, relató a pedido del Sr. Fiscal General las circunstancias en las que fue detenido: "fui detenido en casa de mis padres en el año 1975, llevado a la policía federal y torturado durante cinco días, no me daban agua ni comida.- Después fui presentado al juez federal Manlio Martínez.- Denuncié tortura y robo de todas mis pertenencias y el juez no quiso tomarlas, lo único que hizo es hacerme revisar por el Dr. Freidemberg, que dijo que no tenía nada".-

"Después fui trasladado a la escuela de policía y ahí estuve tres meses compartiendo la prisión con otras personas.- El 26 de Julio fui trasladado al Penal de Villa Urquiza.- En la cárcel había unas ochenta personas y después se produjo un traslado y quedaron menos.- La gente que llegaba a la prisión a fines del 75 eran muy pocas personas y en una condición lamentable".-

"Estaba en el pabellón de encausados con cuatro celdas de veintiocho camastros cada uno y fui sometido a torturas.- Era lamentable cómo venía la gente de los campos de concentración, muchos menores, casi niños, como José Zamorano, que venía del campo de concentración de Famaillá; otro caso que me impresionó mucho fue el de Lito García.- A fines del 75 la situación se fue tornando más dura en la cárcel.- Con motivo de la navidad fue la iglesia y pedimos que se acercara el obispo que iba a visitar a los presos comunes, pero no se acercó a los presos políticos.- Pensamos que esa visita iba a servir para evitar las muertes posteriores. En ocasión del golpe se suspendieron las visitas como por un mes".-

"En mayo hubo un problema con la comida y se prefabricó un motín por parte del guardia cárcel y vino la guardia armada.- Cuando se produjo esto nos sacaron fuera del pabellón, nos comenzaron a golpear y nos tuvieron haciendo ejercicios; nos llevaron al muro y nos golpearon, los que nos golpeaban eran Camilo Amed y Gordillo.- Posteriormente pasaron lista y lo retiraron a Torrente y lo degollaron delante de uno de los compañeros que había quedado escondido en el pabellón con motivo del motín".-

"Al volver al pabellón encontramos manchas de sangre a pesar que lo habían lavado.- Al salir al patio alcancé a verlo a Bussi, a quien conocía por haber vivido en el mismo barrio que él, pasando una casa, esto fue el 26 de mayo del 76.- Después de eso se cortó el recreo y nos llevaron al pabellón de penados que fue mucho peor.- Estábamos alojados en celdas de a uno, no teníamos baño, estábamos encerrados todo el día, las 24 horas, no había servicio médico, ni comida, teníamos un colchón".-

"El 8 de Julio a la noche nos retiraron todas las pertenencias incluyendo los colchones, nos hicieron bañar, enjabonar y cuando nos estábamos por enjuagar nos sacaron a hacer ejercicio y nos golpearon.- Ese día entraron cinco personas a la celda vestidos de médicos, entraron a decir que había una campaña de vacunación y que nos iban a poner una vacuna para la gripe.- Yo no me dejé poner la vacuna y creo que esto me salvó la vida, porque en las otras celdas pusieron la inyección.- A la mañana siguiente, Suter se sentía mal, se lo llevaron a la enfermería y lo mataron de la misma manera que a Torrente, lo degollaron.- Esa misma noche tiraron agua con acaroina en las habitaciones y nos hicieron morder con perros que entraban a la celda.- A partir de ese momento, el 9 de Julio se veía que había fiesta en el penal y por testimonios de otros presos supe que estaba Bussi en el penal, ese mismo 9 de Julio que se produce la muerte de Suter".-

"La situación que vivíamos ellos era tan insoportable que presos comunes hicieron una organización clandestina para ayudarnos, ellos estaban atormentados por la situación que pasaban, por los gritos que escuchaban, se comunicaron con nuestros familiares que hacía mucho no teníamos contacto.- Los detenidos políticos eran sometidos a un régimen distinto al de los presos comunes y éste régimen era muy severo,no tenían suficiente comida y eran sometidos diariamente a torturas".-

Que el Tribunal, en relación con el pedido de la defensa, en el sentido que no se valore éste testimonio por ser el testigo Herrera denunciante de los imputados en otra causa, desestima la pretensión por que ello no inhabilita su comparencia como tal, sin perjuicio de tenerlo presente.-


Declaración testimonial de Carlos Alberto Vega (militar retirado, destinado en Tucumán en diciembre del 74 hasta diciembre del 76, cumplía funciones de inteligencia en el destacamento 42).-

Sostuvo ante el Tribunal: "mis funciones eran información, informes de informantes, confidentes, informes que venían de fuerza de tarea, medidas de contrainteligencia.- No conocía de la existencia de Vargas Aignasse cuando llegó a Tucumán.- Entre los papeles que le tocó manejar no conoció de Vargas".-

Preguntado por el Sr. Fiscal General acerca de: si sabía porqué habían detenido a Vargas: "con golpe del 24 de marzo sabía que lo iban a detener".- Cuando se entera de la detención de Vargas: "al otro día por la lista de detenidos".- Por qué lo iban a detener a Vargas Aignasse; "porque era senador, miembro del gobierno".- Sabía que Vargas estaba detenido en Villa Urquiza: "lo sabía porque era información que circulaba, sabía del secuestro de Vargas Aignasse cuando fue liberado".- Sabía si Vargas era peligroso: "no sabía".-

A fs. 34 a 36, presta declaración ante el juez de instrucción militar numero 76, en esa declaración -oralizada- dijo: "que en cumplimiento de órdenes de la Junta, la Brigada debía detener a todas las personas que significaron un peligro para el desarrollo de las acciones necesarias para la toma del poder y por los antecedentes se ordenaba la detención de Vargas.- Supo que Vargas estaba en Villa Urquiza porque el jefe de destacamento de inteligencia lo sabía.- Supo que fue secuestrado de su domicilio porque fue un caso muy grave.- Se enteró del segundo secuestro por las novedades que circularon en la comunidad informativa.- Que mas allá de los antecedentes de Vargas no sabía nada de su peligrosidad".-



Testimonio de Guillermo Vargas Aignasse (hijo de la víctima).-

El Sr. Fiscal General pregunta que edad tenía en 1.976: "nueve años"; le solicita luego que cuente que pasó el día que secuestraron a su padre: "para mí, hasta ese día, la vida transcurría con la inocencia de un niño, y esa noche me despertó los ruidos de la puerta y una discusión en el pasillo.- Tiempo antes habíamos sufrido un robo en mi casa, yo me quedé quietito en la cama porque pensé que nos estaban robando de nuevo; después de los ruidos en la puerta sentí a mi padre que decía que no lo maten ahí, y una persona que le contestaba.- Sentí que una persona se paró en la puerta y miró a cada una de las camas, al ver que esta persona estaba vestida como una persona común yo pensé que nos robaban, la secuencia es muy rápida, yo no se cuánto estuvo esta gente en mi casa.- Inmediatamente lo empezaron a apurar a mi padre que se cambiara, en un momento él dijo: déjenme que los salude a mis hijos, es lo que yo sentí porque todo era auditivo, volvió a la pieza de mis hermanas, fue a la mía, siempre acompañado de una persona que lo seguía, me vio que yo estaba despierto, me palmeó, me dijo que me quedara tranquilo, y salió".-

"Cuando yo sentí que la puerta se cerró, entonces corrí por la casa buscando a mi madre y a Valle, que eran las dos personas adultas que estaban y encontré a mi madre y a Valle mirando por la ventana del frente de casa, que es una ventana que tiene unas rendijas pequeñas que se puede ver por afuera.- Se me explicó que lo habían llevado preso al papá, esa noche yo dormí con mi madre como muchas otras noches después".-

"Al día siguiente se repitieron los golpes en la puerta, esta vez se presentaron, papá entró, siempre era seguido por una persona, la impresión que tengo es que era gente joven, se comportaron en ese momento pacíficamente, no hubo gritos, había tensión en la casa pero no de la manera del día anterior, mi padre pudo hablar con mi madre, tomó unos remedios, yo estaba ahí, los muchachos que lo acompañaban eran muy jóvenes, el uniforme era azul o celeste, portaban armas de grueso calibre.- Con el tiempo me di cuenta que lo que llevaban eran ametralladoras F.A.L, que hasta hoy las fuerzas de seguridad usan; mi papá retiró una documentación y lo llevaron".-

"Creo que a la verdad material que estaba buscando, mis apreciaciones no suman ni restan, pero creo que ese segundo día me di cuenta que algo serio pasaba y la tensión en la casa iba en aumento y creo que con la perspectiva de los años, cuando uno racionaliza, creo que a la semana vino un vehículo del ejército a buscarla a mi madre para verlo a mi papá, paró al frente de casa, mi mamá le había separado unos cartones de cigarrillos Parissien para llevarle y se fueron en el auto".-

"Mi barrio no tenía cordón cuneta, yo quedé en la puerta de casa había unos charquitos donde había renacuajos y los mosquitos hacen una larva que le daba de comer a mis pescaditos, yo estaba muy angustiado porque tenía miedo que ella no vuelva, eso es lo que recuerdo de esos momentos, de ahí en más, de la última vez que ví a mi padre, que fue la segunda noche que volvió a la casa, en mi a comenzado una búsqueda, una zozobra que yo espero que termine con este juicio y todas las etapas de esa zozobra han ido cambiando al compás de los tiempos, porque siempre creía que iba a tocar el timbre y que iba a volver".-

"Creo que la primera vez que me confronté con que no iba a volver fue por el pediatra que tenía, que hasta el día de hoy le agradezco en su momento el apoyo que me dio, y después cuando vino la democracia y el nunca más y yo ya era un chico que podía entender lo que pasó, creo que la angustia fue peor, porque si antes dudaba, en ese momento empecé a ver una realidad que me acompaña".-

"Yo celebro que todos estemos aquí, habrá quienes no están muy contentos, pero yo celebro que estemos aquí porque este viaje que yo no quise comprar está por terminar.- Para mí este juicio es muy importante, para muchos de los que estamos aquí es muy importante, para los que están afuera, para el país; lo que me faltaría es un lugar para ir a celebrar la memoria de mi padre y eso creo que no lo voy a conseguir nunca, pero yo a él lo recuerdo bien, lo voy a recordar siempre pero la forma que superemos este mal trance, que a mi me ha tocado vivir es este juicio, le doy gracias a todos, tarde, pero llegó , creo que es todo lo que tengo que aportar.-

El Sr. Fiscal General preguntó: si la noche del 24, que secuestraron a su padre, la gente que entró tenía uniforme: "no, yo vi uno que se paró en la puerta y entró a la pieza a ver quienes dormían, esa persona no puedo decir si era joven o no porque tenía la cara tapada, esto lo digo por contraste, porque eran muy distintos a los que llegaron el día siguiente, pero el que yo vi y el que lo acompañó cuando se fue, era una persona que no tenía uniforme y la cara tapada.- Recuerda si su padre tenía armas: "no en mi casa no había armas, había una escopeta que todavía está colgada de adorno en el living".-

Testimonial de Angélica del Valle Tula (vivía en la casa de los Vargas Aignasse al 24 de Marzo de 1976).-

El Sr. Fiscal General pregunta: donde estaba la noche del 24 de Marzo: "estaba en la casa de los Vargas, yo vivía allí porque mi familia era amiga de los Vargas, cuando terminé el secundario, en Escaba no había donde estudiar".- Cuente que pasó esa noche: "ese día no habían ido al colegio porque sabían que iba a haber un golpe, el senador dijo que no vayamos al colegio, porque si había un golpe no quería que estemos afuera, entonces había traído el senador una carpeta con los proyectos de ley.- En la noche vino su hermano Julio y Rodolfo y unos amigos y le dijeron que porque no se iba, que había una lista de gente que iban a detener en Tucumán, que el gobernador, ministros algunos legisladores y que él figuraban en la lista, su hermano le dijo que se vaya y que después se presente y el decía, porqué lo iban a detener y le decían que iban a detener a cualquier persona que se oponga".-

"Se fueron todos, él decide quedarse, eran mas de las dos de la mañana, nos dice que nos acostemos que no iba a pasar nada, que estaba todo tranquilo, nos acostamos y escuchamos una radio, escucho la marcha militar y Guillermo dice: ya está el golpe, sonó el teléfono, era la esposa del Dr. Garretón que nos decía que lo habían llevado unos encapuchados que cortaron el teléfono y que ella estaba hablando de un teléfono del piso superior de sus parientes".-

"Fue una cosa detrás de la otra, la puerta sonó muy fuerte, gritaron policía, policía; automáticamente nos paramos en la puerta con Marta y dijeron habran o les tiramos la puerta, el senador dijo abrí Marta.- Cuando Marta abre la puerta ve que estaban con la cara cubierta, intenta cerrar y entran con fuerza y dicen Guillermo Vargas; el senador dijo ya voy me estoy vistiendo, aparece en la punta del pasillo, yo quedo contra la pared, levantan un arma, yo estaba contra la pared, levanta un arma, intento agarrarlo de la mano, me golpean y pasan y el senador dice no me maten aquí y le contestan, no te vamos a matar aquí, te vamos a matar afuera y me agarran del brazo y me llevan a mi dormitorio.- Yo me volví a levantar, me agarra de los pelos y me vuelve a llevar, dicen apurate o te llevo uno de los chicos".-

"Cuando se viste, el senador les dice dejenme que me despida de mis hijos, antes de irse cortan el teléfono y nos dicen, ‘no se hagan las locas o volvemos y les llevamos los chicos’ y se van.- Nos acercamos a la ventana vemos autos que se van, estábamos aterradas, no sabíamos que hacer ni que decir, eso fue el 24 de marzo.-


El personal que entró a la casa estaba uniformado: "no, tenían botines, el que estaba a la par mía y la cara tapada solo le veía los ojos y estaban armados, el que lo apuró tenía un arma grande".- Le dijeron vestite rápido o te llevamos uno de los chicos:"si eso dijeron, te llevamos uno de los chicos.- Si esa era la guarida que iban a asaltar, con cuatro niños, dos mujeres, ¿de qué guarida me hablan?, llena de pañales y mamaderas, ¿cuál era la guerra, de qué guerra me hablan?, ¿dónde están las armas, de qué soldados me hablan?, ¿cuáles eran los soldados del senador?.- Ahí están los soldados, dos, cuatro y seis años".-

"Al otro día, golpean la puerta y dicen: no se asusten soy yo Guillermo, no se asusten vengo con la policía.- Ya estaban uniformados, fuimos al escritorio, buscaba una carpeta, ninguna lista, los policías estaban uniformados, tenían unas armas largas, le lagrimeaba los ojos con signos que había estado vendado, las muñecas estaban rojas, nos preguntó si estábamos bien, el policía le dijo que no podía hablar, le preguntamos donde estaba y dijo que no sabía".-

La defensora pregunta qué edad tenía a esa fecha: "dieciocho años".- Los señores que entraron el primer día tenían capa o poncho: "no recuerdo, lo que recuerdo es que el que estaba al lado mío no tenía poncho y el que me llevó tampoco.- Cuantas personas eran: "varias, a mi me parecía que eran una multitud, seis o siete".- Que hora entraron el otro día: "era de noche, estábamos acostadas, no venían durante el día".- Qué otra cosa hizo el senador cuando volvió a la casa: "le dimos un remedio".- Como sabe el contenido de esa carpetas: "porque cuando almorzábamos comentaba de su trabajo, él había traído las carpetas, si el tenía una lista, ¿qué lista?, la lista que dice el general que le entregó".- Porque no se presentó en el juzgado a prestar declaración: "porque no sabía que me podía presentar, pero en el año 84 yo hablo con Julio Vargas y sabía que en cualquier momento me iban a llamar".- La llevaron a una habitación, cuándo sale de la habitación: "me llevan a la habitación y salgo detrás de ellos, el primer dormitorio era del senador, yo lo había visto como lo estaban apuntando, estaba muy asustada, no quería quedarme quieta, una persona me lleva a la habitación, me agarran de los pelos, vuelvo a salir".- Estaba presente en la habitación del senador: "no".- .

El Dr. Guerineau preguntó: cuanto tardó el senador en cambiarse: "fue como una película que pasó, una eternidad y por momentos dos segundos".- La defensora interroga por el segundo día que volvió el senador, si éste le dijo algo a su esposa: "le dice que venda el auto y después me pide el remedio y salgo del escritorio a buscar el remedio, todo eso con el policía a la par.- El segundo día entraron dos policías, escucho cuando el senador le dijo que busque la carpeta, no sabe en manos de quien estaba la carpeta que después se encontró, no recuerda".-

La defensa de Bussi pregunta: porqué cree que la policía le daba tanta importancia a la carpeta: "lo que yo digo es que no creo que haya habido una lista de personas que el senador entregó, lo que si sabía es que él dijo que estaban averiguando sobre la policía".- Hasta que edad vivió en la casa de los Vargas Aignasse: "hasta los veintidós años".-

Leer: Argentina: Texto de la Sentencia a los Generales Bussi y Menéndez (VII)

No hay comentarios.: