16/6/08

¿Quién es Iván Paulós?


1962 - Julio 16/-Octubre 19 ­ Iván Paulós realiza el curso de "Military Intelligence" en la US Army School of The Américas, con sede en Panamá. Fue director del Instituto Militar de Estudios Superiores (IMES).

1965-Agosto 25. Participa junto a otros militares nacionalistas de la fundación de la logia de los Tenientes de Artigas, que encabeza el general Mario Aguerrondo.

1973 ­ Febrero. Participa como coronel en el alzamiento militar. Abril 13 - Se integra al directorio de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE) junto a los coroneles Yací Rovira y Martín Guarino (presidente).


1973 Junio 27. Participa activamente en el golpe de Estado.

1977 - Enero 21 - Asume la presidencia de AFE, cuyo directorio integrado por los coroneles Oscar Maciá y Carlos Peladura, encabezará hasta el 15 de marzo de 1978. Ese año, asciende a general.

1978 - 1981 - Asume la Jefatura del Servicio de Información y Defensa, en sucesión del general Manuel Núñez, que ocupaba interinamente el cargo como jefe del Estado Mayor. En el período integra la Junta de Oficiales Generales de las Fuerzas Armadas, asesora del gobierno cívico militar.

1981 - Pasa a retiro por discrepar con la designación del teniente general Gregorio Alvarez como presidente de la República. A partir de entonces su opiniones se realizan a través de la revista "El Soldado" y cartas de los lectores de varias publicaciones.

1985 - 1991 - Ocupa durante varios períodos la presidencia del Centro Militar. Es el candidato más votado en la institución. Desde allí tiene particular protagonismo en el rechazo a toda revisión de la dictadura. En varias ocasiones las reuniones presididas por Paulós alcanzan niveles de "inestabilidad" democrática.

1988 - Setiembre - Obtenidas las firmas para el referéndum de la Ley de Caducidad y ante la campaña del Voto Verde, Paulós declara en la revista Punto y Aparte que no tiene "la menor duda de que ha habido errores, cientos de errores", pero considera que "cuando hablamos de decenas de desaparecidos o de muertos, es una insignificancia para lo que se logró".

1992 - Escribe una carta pública al entonces presidente Luis Alberto Lacalle recriminándole la aprobación de una ley que rebaja las mensualidades de los oficiales retirados. Fue acusado de desacato.

1999 - Enero 8 - En el marco de un debate sobre si corresponde quemar los archivos policiales de la dictadura, el general Paulós propone conservarlos porque "quién sabe si no pueden servir otra vez", dice.

1999 - Noviembre 25 - En un artículo de Búsqueda, Paulós responsabiliza a los partidos tradicionales por el "auge" del Frente Amplio.

2001 - Diciembre - Al cumplir un año de la muerte del Inspector Víctor Castiglioni se realiza un homenaje frente al Panteón Policial. Paulós concurre junto a otros militares, policías y civiles.

2002 - Abril 12 - A 24 horas del aniversario del "Día de los Caídos en Defensa de las Instituciones", declara a Ultimas Noticias que se procura "la desaparición progresiva de las Fuerzas Armadas" para "extinguir los nacionalismos".

2002 - Abril 19 - El Instituto Artiguista del Uruguay (IAU) integrada por generales y coroneles retirados de las Fuerzas Armadas pide en un acto recordatorio del Desembarco de los 33 Orientales que la Comisión para la Paz dé cuentas sobre el dinero que gasta en su actividad. Paulós integra el grupo que preside el coronel (r) Regino Burgeño.

2002 - Mayo 23 - En una carta de lectores de Búsqueda, reivindica al general Esteban Cristi, por el "Operativo Cárcel del Pueblo" con el que el 27 de mayo de 1972 se libera al ex ministro de Ganadería y Agricultura Frick Davis y al presidente de UTE, Pereira Rebervel, secuestrados por el MLN-Tupamaros.

2002 - Setiembre 12 - En un acto recordatorio de los 25 años del fallecimiento del general Mario Aguerrondo, fundador de la Logia Tenientes de Artigas, habla el general Julio César Vadora. Paulós asiste.

2002 - Octubre 19 - Ante el procesamiento del ex canciller Juan Carlos Blanco por la desaparición de la maestra Elena Quinteros, Paulós es entrevistado por el periodista Raúl Legnani de AM LIBRE. "No tengo nada que declarar... pero si empiezan así, van a empezar a hablar los hechos", dice.

2002 - Octubre 23 - Se realiza una reunión de oficiales retirados en el Círculo Militar junto a legisladores del Partido Colorado y el abogado Carlos Curbelo Tammaro, para analizar el procesamiento del ex ministro Juan Carlos Blanco. Paulós es uno de los participantes.

2003 - Enero 3 - Paulós califica como una "incongruencia y una desconsideración" la designación del senador tupamaro Eleuterio Fernández Huidobro como presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara alta.

2003 - Abril 4 - En una entrevista con el periodista Horacio Silva Oneglia, de Ultimas Noticias, sostiene que la recomposición de las carreras de 41 oficiales que habían sido eliminados de los cuadros militares durante la dictadura, implicó un ataque a los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas.

2003 - Mayo 18 - En el acto por los 192 años del Ejército, el teniente general Carlos Daners, señala críticas al informe de la Comisión para la Paz. Paulós asiste junto a los generales retirados Hugo Linares Brum y Julio Rapela, entre otros.

2004 - Agosto 11 - Paulós participa de una reunión entre oficiales retirados y el comandante en jefe del Ejército, general Santiago Pomoli, donde se analiza la situación creada por los homenajes ante el fallecimiento del general Líber Seregni. Hace pública una carta.




Carta de Iván Paulós
El 31 de julio pasado murió Seregni. En los últimos tiempos, no debe haber habido manifestaciones colectivas más numerosas por un fallecimiento, como las que a él se tributaron, ni de orígenes tan distintos, que coincidían en exaltarlo como "General del Pueblo", al lado del Prócer General Artigas.

En la ocasión, el señor Presidente de la República, tan adicto a las lágrimas, ordenó a los tres Comandantes de las Armas que concurrieran al velatorio, con una evidente desconsideración para con el del Ejército, que pocas horas antes había puesto arrestado al general Wins, por colocar en forma inconsulta, precisamente la fotografía de Seregni en el recordatorio fotográfico de la División de Ejército II.

La obediencia debida, que tanto se cuestiona políticamente para las jerarquías militares, también debe aplicarse entre el poder político y el mando superior de las Fuerzas Armadas, cuando, como en este caso, se hiere la personalidad del Comandante y se desconcierta a los subalternos.

El sepelio tuvo también originalidades como los forcejeos con el señor ministro de Defensa Nacional y su señora esposa, por parte de quienes querían impedirle el acceso al ceremonial, los abucheos al señor ministro de Educación y Cultura, que hablando en nombre del gobierno debió interrumpir su discurso; el desastroso intento de cantar el Himno Nacional y la desconsideración para con el Toque de Silencio, que no interesaba oír.

La exaltación apoteósica de Seregni es injusta y agraviante para el pueblo no marxista y para quienes, muertos o vivos integramos las Fuerzas Conjuntas, porque cuando Seregni comandó las fuerzas militares, estaba en posición ideológica adversa a sus cometidos y cuando fueron fuerzas políticas las que comandó lo siguió estando, por lo que recibió el Premio Lenin, con el que lo condecoró la Rusia comunista.

Por algo un Tribunal de Honor del Ejército lo dio de baja de esa fuerza y por algo presidió el conglomerado, formado principalmente por los terroristas Tupamaros que se levantaron en armas contra un gobierno legalmente constituido.

Esa es la persona, que el Poder Ejecutivo y Legislativo homenajearon junto al conglomerado marxista y a espaldas de la verdad histórica y a los merecimientos.

El exitoso manejo de la guerra psicopolítica, ha hecho posible que se olvidara la mejoría colectiva, los asesinatos, robos, secuestros extorsivos, huelgas políticas, voladuras con explosivos, incendios y torturas de que se valieron a sus fines los terroristas Tupamaros. Se ha olvidado también la sacrificada lucha victoriosa de las Fuerzas Conjuntas, que hizo posible el reordenamiento institucional vigente.

Solo se magnifican unilateralmente, las dolorosas e indeseables secuelas que siempre tiene la guerra, en perjuicio de quienes fuimos triunfadores.

A partir del 27 de noviembre de 1983 en que se creó la Conapro (Concertación Nacional Programática) el Poder Político realizó o facilitó el desgaste progresivo de las Fuerzas Armadas.

A partir del 31 de julio de 2004, con la muerte de Seregni, se iniciará la explotación política de esa circunstancia, mediante la cual se acercan cada vez más al poder los terroristas Tupamaros a lo que no pudieron acceder por las armas. De ello los partidos tradicionales serán los responsables, porque criaron la fiera que los va a devorar.

Para el poder político en general y para los marxistas, Seregni es un héroe, pero para la ciudadanía consciente y para quienes somos soldados, fue y será un traidor.

General Iván S. Paulós - Montevideo, 9 de agosto de 2004".






"¿Para quién ganamos esta guerra?"
Considerado un "halcón" del "Proceso Cívico Militar", el General Iván Paulós es un referente para las Fuerzas Armadas. Fue director del Instituto Militar de Estudios Superiores y gobernó la inteligencia militar del régimen hasta su retiro en 1981. Fue el candidato más votado de toda la historia del Centro Militar, institución que presidió entre 1985 y 1991. Este es el resumen de una larga entrevista especial.

--Muchos le reprochan a los militares haberse quedado más de la cuenta.

--Es mentira. He escuchado por ahí que en 1973 estaba liquidada la subversión. Pero esa misma gente olvida que en 1975 y 1976 el Partido Comunista generó un aparato que contaba con armas sofisticadas. Tenían yates, armas AR 15, aviones, de todo. Eran más de 700 hombres entrenados en Cuba.

-- ¿Una vez desarticulado había razón para que las Fuerzas Armadas permanecieran en el poder?

-- En 1977 había otro movimiento bautizado como "La Guacha", formado por gente que había huido al exterior, mayormente a Chile y Argentina. Era una amenaza latente y nosotros lo sabíamos.

--Pero la pregunta es si hacía falta un gobierno militar para enfrentar estas organizaciones.

-- No hay ninguna subversión armada marxista en el mundo que haya sido vencida por una democracia ortodoxa. Para vencerla siempre hubo que apartarse de la democracia. Esta guerra revolucionaria fue puesta en práctica aprovechando los beneficios y las libertades que da la democracia. Aunque bendita sea la democracia.

--¿Usted es una persona que cree en la democracia?

--Yo soy un artiguista y creo que la democracia es el mejor sistema. Los militares somos como sacerdotes de una religión llamada patriotismo. Lo que pasa es que uno ve por ahí un aflojamiento del principio de autoridad legítima. La contraparte de la autoridad legítima es la responsabilidad. Tenemos que aprender de las abejas y las hormigas que existían 200 millones de años antes que nosotros. El secreto es división de funciones y orden interno.

--¿Qué siente respecto al revisionismo de estos días?

--Dígame usted una guerra que no haya tenido desaparecidos, ni sufrimientos. Eso es nada con respecto a lo que se logró para el bienestar de todos. Me duele que haya muerto gente. Si yo veo una abeja en el piso, alargo el paso para no pisarla. Yo no reinvindico la tortura, pero nos estábamos jugando la vida. La nuestra y las de nuestras familias. "Muy lindo tu pibe, pero va a llegar sin orejas", me decían por teléfono.

--¿Siente que 30 años después el conflicto aún no terminó?

-- Hay una ley reafirmada por un plebiscito. Pero no hay duda que hay gente deseosa de revancha. Uno derrota al enemigo no solo cuando lo vence militarmente o cuando ocupa el territorio. Lo vence cuando le quita la voluntad de pelear. Y es evidente que existen quienes quieren desgastar a las Fuerzas Armadas en una guerra psicopolítica en la que estamos de manos atadas. Los profesores de secundaria les dicen hoy a sus alumnos que los tupamaros se formaron para salvar al país de un Golpe de Estado. ¿Usted cómo concibe eso?

--Cree que no es un juego limpio.

--¿Usted sabe de quién era la sangre que le salvó la vida a Sendic? Era nuestra sangre, la única sangre que estaba disponible. Cuando se habla de Derechos Humanos, quién recuerda al practicante que le dio la inyección de pentotal al peón Pascasio Báez. Esa persona (dice el nombre) se recibió de médico y ejerció hasta hace poco en el Hospital de Clínicas. ¿Quien recuerda a este asesino? ¿Qué ética médica le han aplicado? ¿Quién le ha hecho un escrache en su casa?

--¿A usted le han hecho escraches?

-- No, de ninguna manera. ¿Por qué habrían de hacerme un escrache? Nunca me llevé un peso de más a mi casa. En mis años como presidente de AFE solo cobraba mi sueldo en el Ejército. Y eso que AFE tuvo su récord de carga en 1977. Cuando estaba a cargo de los bancos me trajeron un cheque con ocho meses de sueldo y lo rechacé. Y eso que tuve que comprarme un traje en cuotas.

--¿Qué recuerdo le trae el 27 de junio de 1973?

-- Dígame, señor periodista: ¿por qué no sacan un suplemento recordando los 30 años de la declaración del Estado de Guerra que fue en abril? Se recuerda esto porque afectó políticamente a grandes intereses. Y se desprecia el triunfo fundamental de la guerra.

-- ¿Usted está queriendo decir que los medios mienten?

--¿Sabe qué pasa? Los mismos terroristas de ayer ahora son aplaudidos por mucha gente. El aviador que tiró la bomba en Hiroshima mató viejos, jóvenes, embarazadas y aún así era un héroe en Estados Unidos. Pero si hubiera sido uruguayo sería un asesino. Esto es lo que sentimos los soldados: ¿para quién ganamos la guerra?

-- ¿Qué querría decir usted a favor del gobierno militar?

-- Que fue un gobierno honesto e hizo obras sin las cuales no se podría pensar este país de hoy. ¿Qué sería del Uruguay sin Salto Grande, la obra de ingeniería más grande la historia? ¿Quién firmó el Tratado de aguas y límites territoriales con Argentina? ¿Quién construyó los puentes internacionales? ¿Qué sería del Uruguay sin los accesos a Montevideo? Dígame usted qué obras públicas de significación para la gente se han hecho en los últimos 18 años. ¿La Torre de Antel y el edificio anexo del Palacio Legislativo? ¡Por favor! Cuando escucho que los directores de un banco gestionado por el Estado se fijan sueldos de 30 mil dólares me indigno. Cuando me entero que un barrendero gana los mismo que tres paracaidistas me indigno. Cuando me entero que uno que sirve el café en el Banco Central gana lo mismo que un General del Ejército me indigno.

Entrevista a Paulós
Diario El País
2003

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